Una historia...

Esta es la historia de Rorro, que todas las mañanas prende un cerillo para llegar hasta la puerta y ver si está lloviendo. Le tiene miedo a la nieve, a la lluvia, al granizo, a las regaderas y a las cascadas. Rorro se baña en tina y es feliz en albercas, lagos y mares.

Esta la historia de Rorro, de una vez que tuvo frío en verano. Ese día había nubes y la lluvia se acercaba. Cerró todas las ventanas, aseguró la puerta, puso leña en la cocina, buscó una vieja bufanda se puso dos playeras, una cobija y un impermeable. No salió de su casa temeroso del agua que caía.

Esta la historia de Rorro, que salió el día que la luz de un cerillo le confirmó que ya no llovía. Con timidos gestos abrió la puerta, asomó una pierna, luego la otra y al final la cabeza. El agua se quedó en todos lados, en miles de charcos. Rorro suspiró aliviado y buscó a las personas.

Esta es la historia de Rorro, del diá que salió de su casa y descubrió que estaba solo.

Llamado a las armas...

Primera llamada, primera:

A quien necesite gritarle cosas a la gente.
A quien crea que lo escrito debe ser escuchado.
A quien no sabe que hacer entre tanta mierda.
A quien necesita un pretexto para salir de su casa.
A quien busca nuevas maneras de ligar.

Prepara tu garganta y alístate en el pelotón poético.


México DF, 2010